25 Abr El Banco Mundial destina $11 millones para Q. Roo
CHETUMAL, Q. Roo.- El Banco Mundial destinará, este año, al estado de Quintana Roo cerca de 11 millones de pesos en proyectos productivos, especialmente para el desarrollo de comunidades rurales que dependen de los bosques.
Manuel Aldrete Terrazas, coordinador nacional del Mecanismo Dedicado Específico (MDE) para Pueblos Indígenas y Comunidades Locales (PICL) de México en el estado, indicó que el dinero es una iniciativa especial del Programa de Inversión Forestal.
Explicó se trata de un programa piloto que se desarrollará en los estados que corresponden a la Península de Yucatán, en el cual se aplicarán 29 proyectos, de los cuales, 22 están destinados para Quintana Roo, cinco para Campeche y dos para Yucatán.
Dijo que en el caso de la entidad están el manejo y enriquecimiento de Acahuales en 11 ejidos como Petcacab, Noh Bec, Limones, Dzulá Yoactún, X-Yatil, Laguna Om, Payo Obispo, Tres Garantías, Caobas y X-Hazil.
Otros corresponden a la producción de carbón vegetal en los ejidos de Lázaro Cárdenas, Kankabchen, X-Yatil, Noh Bec, Tres Garantías y Pectacab.
También se impulsará a mujeres de Pectacab que producen artesanías contemporáneas y una estrategia comercial para el Consorcio Chiclero “Chicza”.
Asimismo, se establecerán sistemas agroforestales en José María Morelos; se impulsará el Centro Ecoturístico Chichan Há en Caobas y se beneficiará al ejido Dziuché, con un proyecto de manejo forestal comunitario.
El entrevistado dijo que el objetivo es fortalecer las capacidades de las personas que dependen de los bosques para su conservación e implementar prácticas hacia un modelo de desarrollo sustentable.
El Comité Directivo Nacional (CDN) está integrado por 15 representantes de los pueblos indígenas de Jalisco, Oaxaca, Campeche, Yucatán y Quintana Roo.
Este es el órgano de representación y de toma de decisiones para la aplicación de recursos en estos territorios, mismos que contribuirán al manejo sostenible de los paisajes forestales para detener su deforestación y degradación.
Crédito: Alejandra Carrión/SIPSE
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